Pues nada, hoy toca dos entradas al precio de una…
En mi paseo diario por los blogs que sigo, me he encontrado con una iniciativa interesante en Somos Viajeros: 4 de Octubre, la Blogosfera con Birmania. Ya se que hoy es día 5, pero como llevaba varios días pensando en escribir algo al respecto, me parece una buena ocasión.
Birmania (en realidad habría que decir Myanmar, su nombre oficial actual) está gobernado por una dictadura militar desde 1962. Es peculiar las desigualdades que se observan en la política internacional. En otras situaciones y países, bajo la suposición de un posible conflicto las fuerzas internacionales han entrado para ver de solventar la situación. En Birmania tenemos un premio Nobel de la paz, Aung San Suu Kyi, en arresto domicialiario desde 1989, quien ganó incluso unas elecciones presidenciales en 1990.
Si esto no fuera suficiente, la represión es una práctica habitual e indiscriminada, centrándose sobre todo en las minorías étnicas.
La represión de las últimas fechas ha sido la gota que ha colmado el vaso. El gobierno ha decidido unilateralmente subir el precio de muchos alimentos básicos. La población, empobrecida, no ha podido aguantar más esta situación. Y ha encontrado un buen aliado, con gran poder mediático: las mareas de monjes budistas que han desfilado por las calles han supuesto por lo visto un buen motivo para los cámaras, y un conflicto que lleva lustros olvidado ha aparecido por fin en las pantallas.
Valga mi granito de arena para mantener el vivo el recuerdo de este pueblo sometido a una cruel dictadura y olvidado por la política internacional. Más ahora que ciertos planes junto con las tonterías monárquicas han desterrado esta realidad de las primeras planas…
En mi paseo diario por los blogs que sigo, me he encontrado con una iniciativa interesante en Somos Viajeros: 4 de Octubre, la Blogosfera con Birmania. Ya se que hoy es día 5, pero como llevaba varios días pensando en escribir algo al respecto, me parece una buena ocasión.
Birmania (en realidad habría que decir Myanmar, su nombre oficial actual) está gobernado por una dictadura militar desde 1962. Es peculiar las desigualdades que se observan en la política internacional. En otras situaciones y países, bajo la suposición de un posible conflicto las fuerzas internacionales han entrado para ver de solventar la situación. En Birmania tenemos un premio Nobel de la paz, Aung San Suu Kyi, en arresto domicialiario desde 1989, quien ganó incluso unas elecciones presidenciales en 1990.
Si esto no fuera suficiente, la represión es una práctica habitual e indiscriminada, centrándose sobre todo en las minorías étnicas.
La represión de las últimas fechas ha sido la gota que ha colmado el vaso. El gobierno ha decidido unilateralmente subir el precio de muchos alimentos básicos. La población, empobrecida, no ha podido aguantar más esta situación. Y ha encontrado un buen aliado, con gran poder mediático: las mareas de monjes budistas que han desfilado por las calles han supuesto por lo visto un buen motivo para los cámaras, y un conflicto que lleva lustros olvidado ha aparecido por fin en las pantallas.
Valga mi granito de arena para mantener el vivo el recuerdo de este pueblo sometido a una cruel dictadura y olvidado por la política internacional. Más ahora que ciertos planes junto con las tonterías monárquicas han desterrado esta realidad de las primeras planas…